Cuando accedemos a Internet tenemos a nuestra disposición una inmensidad de información, hasta el punto de ser inabarcable, pero la realidad es que Internet esconde mucho más.
Cleartnet o Internet superficial
También llamada Web Visible, Web Indexada, Lightnet o Clearnet. Es la parte de la World Wide Web que está disponible para el público en general y que se puede buscar mediante motores de búsqueda convencionales como Google, Bing o DuckDuckGo, entre otros.
Se estima que este contenido apenas alcanza el 10 % de la información que circula por Internet.
Deep Web o Internet profunda
La Deep Web es la parte de Internet que no está indexada por los motores de búsqueda tradicionales, eso no significa que no podamos acceder a su contenido.
Su infraestructura de red aleatoria y medidas de seguridad basadas en cortafuegos y cifrado de la red evitan que sea indexada por los motores de búsqueda convencionales.
Suele emplearse para preservar contenido confidencial como, por ejemplo, las redes privadas de las empresas, conocidas como Intranet. También se ubican grandes archivos de información, bases de datos y cualquier otro contenido al que se acceda mediante un enlace directo. El acceso suele estar delimitado por algún tipo de filtro o control como contraseñas, suscripciones o paywalls.
Dark Web o Internet oscuro
Es la parte más profunda, oculta y peligrosa de la Deep Web. Se estima que no llega al 2 % del tráfico que circula por Internet.
En ella pueden encontrar un mercado negro de productos robados, sustancias ilegales, armas o documentación, pornografía infantil, etc.
Conocidos son los casos de Alphabay, un sitio web dedicado al mercado negro de productos robados, sustancias ilegales, armas y documentación, y Candyman, que a través de Facebook y WhatsApp distribuían contenido pedófilo. Ambos sitios han sido desmantelados, aunque han surgido otros.
Para acceder a su contenido necesitarán un navegador que le permita acceder a dominios que no están registrados en el sistema de nombres de dominio (DNS) o que usan protocolos de comunicación diferentes al estándar como Tor, ZeroNet, I2P o Freenet. Estos navegadores evitan que las páginas puedan obtener la huella digital del navegador, lo que se conoce como fingerprint.
Si está decidido a entrar en la Dark Web use una VPN (Virtual Private Network o Red Privada Virtual) para proteger su privacidad. Una VPN cambia su dirección IP y cifra su conexión, evitando que pueda ser rastreado, al tiempo que protege sus datos. Las hay gratuitas, como ProtonVPN Free, Hotspot Shield Free VPN o Windscribe, pero si realmente quiere garantizar su privacidad opte por una VPN de pago. El coste no es elevado y existen multitud de opciones, entre las que recomiendo: ProtonVPN, Mullvad, iVPN y Njalla. Como navegador les recomiendo que usen Tor.
Si no quieren emplear una VPN, los expertos aconsejan emplear un sistema operativo portátil en vivo como Tails, Whonix o Qubes.
A mayores, como medida de seguridad, asegúrese de tener un software antimalware actualizado y de calidad. También es importante deshabilitar el micrófono y cubrir la webcam de su dispositivo.
Una vez dentro de la Dark Web evite descargar archivos y hacer clic en los enlaces, pues el riesgo de descargar algún tipo de malware es elevado y NUNCA revele datos personales.
Conclusión
Cuando uno se adentra en una ciudad que no conoce suele evitar los suburbios, las zonas marginales y no tan seguras. Adentrarse en la Dark Web sería lo mismo. No tiene porque pasarle nada, pero asume riesgos innecesarios.
Por último, el consejo que siempre les doy: en Internet actúen con sentido común.