Los vecinos del Estadio Bernabéu han puesto el grito en el cielo tras los conciertos multitudinarios celebrados en las últimas fechas. No solo denuncian el ruido ensordecedor, también la degradación del entorno por la acumulación de basura y orines. Las imágenes de personas orinando en el entorno del estadio salieron hasta en los telediarios.
Orinar en la vía pública es una marranada. Lo siento, alguien tenía que decirlo. Bastante tenemos con los orines de los perros. Hay calles que son intransitables. La culpa no es de los animales, sino de los dueños, pero volvamos al tema que nos ocupa, que me disperso.
Cuando una persona orina en la vía pública –a plena luz del día y a la vista de todos– se arriesga a que cualquier viandante le grabe con su teléfono móvil. A veces, parece que olvidamos que nos rodean infinidad de cámaras, de hecho, todos llevamos una cámara en el bolsillo.
Cuando una persona orina en la vía pública ese acto, en principio, íntimo deja de serlo, pues sale de la esfera privada. No puede pretender la aplicación de una protección quien no se la aplica a sí mismo, al desvelar de forma voluntaria su imagen, sabiendo que puede ser visualizada por cualquier viandante. La intimidad y la propia imagen están delimitadas por las pautas de comportamiento de la persona.
La Audiencia Provincial de Sevilla, Sección 6ª, en la Sentencia 505/2006, que dejo enlazada aquí, resuelve la denuncia de un personaje famoso que fue grabado en la vía pública mientras orinaba. Las imágenes se difundieron en diversos programas de televisión. El tribunal entiende que no se vulneró su derecho a la intimidad y a la propia imagen, por cuanto la persona se expuso en la vía pública. El hecho de que sea un personaje público afecta al grado de intimidad, pero no es determinante. Lo es el hecho de hacer un acto impúdico a la vista de todos.
El caso comentado contrasta con el de «La Maruxaina» que está pendiente de juicio. Este caso parte de la denuncia de multitud de mujeres que fueron grabadas con cámaras ocultas, colocadas en los bajos de varios vehículos aparcados en un callejón, al que acudieron las víctimas para orinar, sin ser vistas, durante las fiestas de la Maruxaina celebradas en San Cibrao en el año 2019. Las imágenes acabaron en portales con contenido para adultos. Las diligencias fueron archivados en un primer momento y reabiertas por orden de la Audiencia Provincial de Lugo, tras el recurso de las víctimas.
Conclusión
Si quieren defender su derecho a la intimidad, sería bueno que empiecen por no exponerla en la vía pública.