El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) refiere siete datos que nunca debes compartir en Internet.
- Dirección de correo electrónico y número de teléfono. Podemos ser víctimas de ataques basados en ingeniería social, spam, phishing, estafas, etc.
- Dirección y ubicación en tiempo real. No sabemos si alguien puede actuar con malas intenciones, por ejemplo, robando en nuestra casa si saben que estamos lejos de ella. Si salen de vacaciones, compartan en redes sociales sus vídeos y fotografías a toro pasado.
- Imágenes de menores. No sabemos dónde pueden acabar esas imágenes ni qué uso pueden hacer. Si suben la imagen de un menor siempre, repito, siempre cubran su rostro y no se preocupen por “estropear” la fotografía, lo importante es preservar la intimidad del menor.
- Fotografías íntimas o comprometedoras. Piensen en las consecuencias antes de darle a “enviar”. Eviten el sexting o sexteo (envío de mensajes sexuales, eróticos o pornográficos por medio de teléfonos móviles) y enseñen a sus hijos sobre los riesgos que esta práctica conlleva.
- Documentos personales como DNI, carnet de conducir o pasaporte. El riesgo de ser víctimas de una suplantación de identidad es real y las consecuencias pueden ser inimaginables.
- Opiniones, quejas, comentarios comprometedores u ofensivos. Cada cual puede pensar libremente lo que quiera pero sin ofender a nadie.
- Conversaciones privadas. Dependiendo del contenido podemos incurrir en un delito de revelación de secretos.
Conclusión
Actúen con sentido común y prudencia y piensen que cualquier cosa que compartimos en Internet tiene consecuencias.